Hay estudios que sugieren que este nutriente podría jugar un papel protector en la salud ocular.
Nadie duda ya del papel fundamental de la vitamina D para el buen estado de nuestro organismo. “Gracias a que los conocimientos sobre ella aumentan cada día, podemos decir que, ahora, se le da la importancia debida, ya que está implicada en el funcionamiento de varios órganos del cuerpo”, nos comentaba la doctora Nines Almazán, médico de familia de la Clínica Instituto Palacios de Ginecología y Salud de la Mujer, que destaca su importancia a la hora de ayudar al cuerpo a absorber el calcio, por lo que es fundamental a nivel óseo. Pero es que, además, la vitamina D también juega un rol importante en el sistema nervioso, muscular e inmunitario. Pero tal vez no has pensado en que la falta de vitamina D también afecta a la salud ocular, ya que incide en la protección que las células de la retina tienen frente al daño producido por los rayos UV, tal y como explican los expertos de VISUfarma. Para hablar sobre este vínculo entre este nutriente y la salud de nuestros ojos hemos hablado con el doctor Alberto Calvo, oftalmólogo de Clínica Baviera Logroño.
Siempre que pensamos en la salud de nuestros ojos, pensamos en la vitamina A, pero ¿puede afectar un déficit de vitamina D en nuestra salud ocular?
Hasta el 40% de la población adulta en España y el 80% de los mayores de 65 años presenta en mayor o menor medida déficit de esta vitamina. Estas concentraciones bajas de vitamina D en población española puede explicarse por el bajo aporte en la dieta, la protección solar en verano y porque la mayor parte de España se encuentra en zonas donde la posibilidad de sintetizar vitamina D es escasa en determinadas épocas del año. La vitamina D es una hormona multifuncional, que no solo afecta al metabolismo del calcio, sino que juega un papel en la regulación del sistema inmune, así como en el crecimiento y supervivencia celular. Varios tipos celulares oculares pueden activarse en respuesta a la vitamina D, lo que la hace una molécula biológicamente relevante e interesante a estudiar en lo referente al aparato visual. Los estudios epidemiológicos nos muestran que los niveles de vitamina D y las variaciones genéticas influyen en el desarrollo de una amplia gama de patologías, como la miopía, la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), la retinopatía diabética y la uveítis. Todo ello sugiere que la vitamina D podría jugar un papel protector en la salud ocular.
¿Por qué es importante mantener sus cifras en niveles óptimos si queremos tener unos ojos sanos?
Mantener unos niveles adecuados de vitamina D (en la mayoría de las guías de sociedades médicas se recomiendan niveles en torno a 30 y 50 ng/mL) nos ayudará a mantener la integridad del sistema osteomuscular e inmune y puede presentar también un efecto beneficioso a nivel ocular.
¿Qué problemas relacionados con la salud ocular pueden estar vinculados a un déficit de Vitamina D?
El ojo es un órgano metabólicamente muy activo, con unos requerimientos que lo hacen uno de los órganos más profusamente vascularizados del organismo. Ello lo hace especialmente sensible a determinados déficits como lo puede ser el vitamínico.
En un estudio reciente se ha descrito una posible relación entre presentar niveles bajos de vitamina D y la aparición de nuevos episodios inflamatorios en pacientes afectos de uveítis no infecciosa, un tipo de inflamación ocular. Existen varios estudios que proponen que este déficit puede favorecer la aparición y progresión de la DMAE y también algunos autores lo relacionan con el déficit de producción de lágrima u ojo seco. También se ha encontrado que pacientes miopes registran una menor concentración en sangre de vitamina D que los no miopes. Algunos autores han asociado el déficit vitamínico con el grado de severidad de la retinopatía diabética y con el posible desarrollo de glaucoma primario de ángulo abierto, el subtipo más frecuente de glaucoma a nivel poblacional.
¿Es recomendable, por lo tanto, tomar suplementos de esta vitamina en determinadas ocasiones?
Se recomienda una ingesta diaria mínima de vitamina D. Las guías recomiendan suplementar en casos de déficit analítico de la misma. También se recomienda suplementar la dieta en algunos grupos de edad avanzada para mejorar la salud ósea y reducir el riesgo de fractura no vertebral y en aquellos pacientes con debilidad muscular y riesgo de caídas.
No existe evidencia para el uso de suplementos de vitamina D con el fin de obtener beneficios fuera del aparato osteomuscular y para reducir la incidencia de cáncer en la población general y esto es, por tanto, también aplicable a lo que se refiere al aparato ocular.
Fuente: Hola