La diplopía o visión doble, alteración de la visión que ha dejado a Marc Márquez sin poder disputar la última carrera del Mundial de MotoGP, consiste en, según el Instituto de Microcirugía Ocular (IMO), “la percepción de dos imágenes de un mismo objeto. Puede ser horizontal, vertical o diagonal, dependiendo del lugar en el que aparece la imagen duplicada (al lado, encima, debajo o en diagonal al objeto)”. Además, según su origen, puede ser de dos tipos:
- Monocular (afecta a un solo ojo): es poco común y está relacionada con una anormalidad del ojo, como astigmatismo o un tipo de catarata.
- Binocular (afecta a los dos ojos): es el tipo más común y ocurre cuando los ojos no se alinean entre ellos correctamente. Suele estar relacionada con el estrabismo.
Es importante consultar con un médico para descartar problemas graves si se produce visión doble, pero también existen otros síntomas de la diplopía que no se pueden pasar por alto como desalineación de uno o ambos ojos, dolor alrededor de estos, dolor durante los movimientos oculares, dolor de cabeza, debilidad en los ojos, náuseas o párpados caídos.
¿Cuáles son las causas de la diplopía?
El Institut Català de la Retina (ICR) establece las distintas causas que pueden provocar esta visión doble, tanto monocular cómo binocular:
Causas de visión doble monocular
• Error de refracción no corregido, habitualmente astigmatismo
• Problemas del cristalino como, por ejemplo, una catarata
• Enfermedades de la córnea
• Alteraciones de la retina como membranas epirretinianas
Causas de visión doble binocular
• Estrabismo
• Traumatismos orbitarios
• Parálisis o mal funcionamiento de nervios
• Alteraciones en el sistema nervioso central
• Problemas de tiroides o enfermedades musculares
Diagnóstico y tratamiento de la diplopía
Con el fin de valorar las características concretas de la patología y, así, determinar el posterior tratamiento, el especialista será quien realice una exploración oftalmológica completa que incluya, tal como detalla el ICR, una valoración de la motilidad ocular (capacidad para realizar movimientos oculares de manera coordinada); pruebas de ortóptica, mediciones en cada posición de la mirada; y pruebas complementarias que pueden ir desde una analítica general hasta hormonal (para valorar tiroides); pruebas de imagen (resonancia cerebral o tomografía computarizada) cerebral y ocular cuando se sospecha alguna causa neurológica o compresiva.
Así pues, el tratamiento va enfocado a corregir la causa de la diplopía. En algunos casos será necesaria la utilización de prismas (cristales que se aplican en las gafas y ayudan a desplazar la imagen que produce la visión doble) y, en caso de que no se pueda tratar con una corrección prismática, se recurre la administración de toxina botulínica o a una intervención quirúrgica que consiste en la movilización de los músculos con el objetivo de devolver la alineación ocular.
Fuente: Mundo Deportivo