La salud ocular es muy importante, por eso hay hábitos que podemos adoptar para mantener nuestra vista sana y prevenir ciertos problemas en nuestros ojos. Circunstancias como la operación de cataratas no se pueden evitar, ya que esta es una enfermedad ligada a la edad que tarde o temprano todos acabamos padeciendo, pero sí podemos mantener a raya factores que contribuyen al envejecimiento o daño acelerado de las estructuras oculares.
Estas son algunas de las actividades que puedes empezar a realizar para mejorar tu vista y cuidarla a largo plazo:
- Utilizar gafas de sol homologadas. A menudo no le damos importancia a la calidad de las gafas que usamos para protegernos del sol y, sin embargo, deben tener filtros homologados para que nuestra vista esté protegida y segura con ellas. En tu próxima compra no solo te fijes en el precio y el diseño, asegúrate de que cuentan con el distintivo que certifica su nivel de protección ante los rayos UV.
- Hacer deporte. El ejercicio es una actividad que mejora nuestra salud, incluida la de nuestros ojos. Es especialmente recomendable la práctica regular de ejercicio aeróbico que mejora la circulación y aumenta la oxigenación de los tejidos, como correr, ir en bicicleta etc. Y si lo tuyo son los deportes de pelota, de contacto o acuáticos, disfruta de sus beneficios evitando riesgos con las gafas de protección adecuadas.
- Pasar menos tiempo delante de una pantalla. En la jornada laboral solemos pasar muchas horas delante del ordenador y, si a eso le sumamos otras actividades como ver series y películas, consultar las redes sociales e informarnos o jugar con el móvil, estaremos casi todo el día fijando nuestra visión sobre dispositivos tecnológicos. Esto puede aumentar nuestra fatiga visual y sequedad ocular, entre otros, por lo que conviene moderarlo.
- Pasar tiempo al aire libre. Despejar la mirada en ambientes exteriores favorece cambiar el enfoque y mirar a diferentes distancias. Nuestros ojos necesitan mirar tanto de cerca como de lejos para mantener una salud ocular óptima, algo especialmente importante en el caso de los niños. Además, salir de entornos con iluminación artificial, aires acondicionados y calefacciones también favorece que se reduzcan algunas molestias oculares.
- Acudir a revisión. Se recomienda que por lo menos una vez al año tengamos una cita con el oftalmólogo para que nos hagan un chequeo, sobre todo durante la infancia y a partir de los 40 años. Es importante no dejar pasar estas revisiones porque el avance de muchos problemas de visión a veces no se nota de forma evidente, y es en consulta donde se puede detectar cualquier anomalía. Cuando estamos bien controlados, el profesional médico puede indicarnos el momento idóneo para realizarnos tratamientos como una cirugía de cataratas.
- Cuidar nuestra dieta. Una buena alimentación nos garantiza que nuestro organismo reciba las vitaminas y nutrientes necesarios. Para el cuidado de la visión son especialmente importantes los alimentos ricos en omega 3, como los pescados azules, y en antioxidantes, como naranjas, zanahorias, tomates, verduras de hoja verde y frutos secos, entre muchos otros.
- Descansar lo suficiente. Dormir entre 7 y 8 horas es lo más indicado para que todo nuestro cuerpo se relaje y pueda recuperarse del cansancio del día a día. En cuanto a nuestros ojos, facilita por ejemplo que se oxigene la córnea, sobre todo en quienes usan lentes de contacto en sus jornadas. Por el contrario, un sueño escaso o de mala calidad puede propiciar o agravar diferentes trastornos oculares.
- No fumar. El tabaco es muy perjudicial para la salud, ya que deteriora nuestro organismo ocasionando diversas enfermedades que no solo afectan a los pulmones. A nivel ocular, los efectos nocivos del tabaco pueden aumentar la probabilidad de sufrir cataratas o patologías de la retina como la degeneración macular.
- Mantener una buena higiene ocular. La limpieza rutinaria de los párpados es imprescindible para muchas personas que tienen ojo seco. Por otro lado, tanto si usas lentillas como si te maquillas los ojos, debes tener especial precaución con los productos que utilizas y su mantenimiento para evitar irritaciones o infecciones. Y en cualquier caso, a todos nos favorece evitar el contacto directo de las manos con el globo ocular. Si notamos picor o cualquier molestia, podemos utilizar lágrimas artificiales que nos alivien, pero nunca frotarnos el ojo, un hábito dañino por diferentes motivos.
Estas son solo algunas recomendaciones para mantener la salud ocular en buenas condiciones. Recuerda que ante cualquier síntoma que percibas debes acudir a un oftalmólogo para que te ofrezca un diagnóstico preciso y determine si sufres alguna patología y cómo tratarla.
Fuente: Madridiario