La presión ocular elevada o más conocida como Hipertensión ocular es cuando la presión dentro del ojo es más alta de lo normal.
Si no se trata a tiempo y correctamente, la presión ocular elevada puede causar glaucoma y la pérdida permanente de la visión.
Y hay que tener cuidado, ya que las personas que pueden tener hipertensión ocular sin presentar daños a la visión. Por lo mismo, es muy importante la visita anual al especialista.
Según la Academia Americana de oftalmología, “cuando existe hipertensión ocular, la parte del ojo no drena líquido adecuadamente. Esto hace que la presión ocular aumente. Una presión ocular más alta de lo normal puede causar glaucoma”.
El glaucoma involucra múltiples factores y presenta algunas características tales como: daño del nervio óptico y pérdida del campo visual.
La Organización Mundial de la Salud afirma que el glaucoma es la segunda causa principal de ceguera en el mundo.
¿Tengo presión ocular elevada?
Es imposible saberlo a simple vista, ya que no hay signos externos que lo comprueben.
¿Cómo se trata la hipertensión ocular?
Éste es muy personalizado, ya que depende de cada caso.
Puede ser a través de fármacos, láser o cirugías que logran una reducción eficaz de la presión ocular.
¿Quiénes están en riesgo de padecerla?
Cualquier persona puede desarrollarla, pero hay personas que tienen mayor riesgo de sufrirla, tales como:
- Diabetes o presión alta.
- Personas con antecedentes familiares.
- Quienes usen esteroides prolongadamente.
- Haber sido intervenido quirúrgicamente.
- Miopes o hipermétropes altos.
- Personas de raza negra o asiática.