La patología aumenta el riesgo de padecer cataratas, glaucoma, desprendimiento de retina, maculopatía miópica e, incluso, la pérdida de visión permanente.
Las personas nacidas entre 2002 y 2021 conforman la generación con la mayor tasa de miopes, en comparación con generaciones anteriores, por lo que se prevé que más del 50% de la población mundial es o será miope, de acuerdo con los datos recogidos en el último Congreso Internacional de Optometría, Contactología y Óptica Oftálmica (OPTOM 2022).
Pariendo de estas valoraciones, desde la compañía Cottet inciden en la importancia de realizarse revisiones oculares anuales en toda la población para reducir posibles deficiencias que pueden minimizarse con la detección temprana y apuntan que, la salud visual de los más jóvenes se ha visto afectada en los últimos años por los cambios sociales y tecnológicos que se están produciendo.
Respecto a la miopía infantil, la prevalencia actual es del 30 al 40%, y se estima que llegará al 60% en los próximos años, con los riesgos para la salud visual que supone cuando la miopía alcanza determinados valores.
Por ello, la compañía enfatiza la importancia de intervenir y lograr una detección temprana en niños y jóvenes con miopía para minimizar el impacto en su salud ocular a largo plazo.
Resultados positivos
Los beneficios de una función visual mejorada pueden tener un resultado positivo en el rendimiento, ya que la visión está estrechamente ligada al proceso de aprendizaje.
En esta línea, diferentes estudios indican que hasta un tercio de los casos de fracaso escolar tienen su origen en un problema de visión.
“Son la mejor herramienta para prevenir y reducir posibles disfunciones visuales. Es necesario concienciar sobre ello a todos los profesionales de la salud, educadores, familia y entornos relacionados para que se hagan revisiones con su óptico de referencia. Sabemos que en la mayoría de los casos la miopía aparece entre los 6 y 10 años y se desarrolla durante la época de crecimiento, estabilizándose entre los 21 y 25 años de edad”, apunta el director óptico de Cottet, Fabio Delgado.
Por último, señalan desde el propio centro óptico, que lo correcto sería hacer exámenes visuales anualmente o con mayor frecuencia, según cada caso para detectar el problema cuanto antes.
Fuente: Deia